Hace poco, un cliente a quien quería mostrarle los beneficios de una consultoría inmobiliaria me dijo: “Allan, estuve tan atareado que no tuve tiempo de ver la información; y aún no paro”. De hecho, hay demasiada gente dedicando sus horas más fructíferas a tanta ‘microgestión’ que pierden de vista las prioridades.
En este punto, es importante comprender que la persona que intenta hacerlo todo puede acabar no consiguiendo nada. Por un instante, imaginemos dedicar todo nuestro tiempo y energía a subir una montaña y descubrir al llegar a la cima que era la montaña equivocada.
Para ganar en el ajedrez de las propiedades hay que mapear, entender y anticipar los movimientos. Y Peter Drucker, experto en dirección de empresas, lo explicó admirablemente: “No hay nada tan inútil como hacer de un modo eficiente aquello que no es necesario hacer”.
¿Qué debemos hacer?
Para empezar, comprender que esos minutos dedicados a la consultoría inmobiliaria te ahorran tiempo y dinero. Además, te permitirá replantear asertivamente tu dirección estratégica. Al priorizar y liberarte de los excesos, podrás utilizar mejor tu tiempo y tomar decisiones informadas.
El Servicio de Análisis de Eficiencia Inmobiliaria [S.A.E.I.]
En mi anterior artículo comenté que la Era Digital trajo consigo cambios profundos y transformaciones. Y debe hacerse de la mano de expertos capaces de analizar dicha información, diagnosticar el problema y presentar soluciones innovadoras. Esto es clave en un momento en el que la competencia se ha vuelto realmente feroz y los clientes son más omnicanales.
Ante esta situación, la asesoría tradicional, tal y como la conocemos, comienza a quedarse atrás al no ser capaz de dar respuesta a los nuevos desafíos. Para ello, es imperativo analizar las tendencias del mercado inmobiliario y alinear los objetivos financieros con sus oportunidades reales.
El servicio de análisis de eficiencia inmobiliaria nos permite, esencialmente:
¿Cómo creamos valor?
A través decisiones informadas que permitan alcanzar tus objetivos financieros. Así de simple, así de grandioso. El primer paso es tener un claro conocimiento de la situación actual. Esto nos dará las bases para determinar el ‘Customer Discovery’ sobre el cual integraremos la inteligencia de mercado. De esta manera, detectamos tus necesidades reales para ofrecer una solución 100% adecuada y 100% personalizada.
Cabe señalar, que intentar convencer a un cliente de que tenemos el mejor producto, tiene cada vez menos efecto. Y esto no nos interesa. El S.A.E.I., en cambio, nos permite conocer y alinear las necesidades concretas del cliente para que tome decisiones informadas y logre sus objetivos financieros.
¿Tiene alguna dificultad esta consultoría?
No. Al contrario, es un proceso estructurado, metódico y estratégico. Sin embargo, el principal reto, en nuestra experiencia, radica en dos aspectos principales:
- Que lo realice un asesor realmente calificado.
- Que alinear ‘los criterios de decisión’ requiere de una flexibilidad de pensamiento.
Adaptarse al cambio no es necesariamente fácil, pero es precisamente allí donde radica la clave de su implementación hacia el logro de los resultados.
En Conclusión
Es fundamental que se analice bien en qué estado se encuentra la compañía en este momento. El rol del consultor inmobiliario es alinear la estrategia para que el cliente obtenga el máximo valor posible con las soluciones presentadas.
Quien conoce bien el S.A.E.I., conoce estos 3 secretos:
- No es un proceso de decisiones impulsivas.
- Se requiere escuchar activamente al cliente en vez de hacer discursos de venta.
- El asesor es un profesional puesto a su servicio.
El objetivo del S.A.E.I., es lograr que tomes decisiones informadas a través de una consultoría inmobiliaria integral. Es en este punto donde tendrás el reto de convertir todo ese conocimiento en una ventaja competitiva a tu favor. ¡Aprovéchalo!
Allan Guevara III
Consultor Inmobiliario, Master Brokers
